La Rosquilla, Gusanos Grises

Control de Plagas: La Rosquilla del Maíz

Los gusanos grises o rosquillas son las larvas de polillas nocturnas migratorias de la familia Noctuidae, principalmente especies del género Agrotis como el Agrotis Segentum o el Agrotis Ipsilon. Se trata de una plaga subterranea que se alimenta de las plantas jóvenes a nivel del cuello o justo por debajo del nivel de suelo, corándolas parcial o totalmente y provocando retraso del crecimiento, marchitamiento y/o muerte.

 

Las rosquillas son orugas gruesas, redondeadas y con un espectro de colores que varía dependiendo de la especie desde el gris oscuro al marrón verdoso con puntos negros a lo largo del cuerpo. Estas larvas tienen una longitud de entre 3 y 5 cm. De hábitos nocturnos, durante el día se esconden en pequeños túneles superficiales en el suelo o bajo rastrojos.

 

Emergencia: dado que las rosquillas tienen una temperatura base de entre 7 y 10ºC, el inicio de su actividad coincide con el periodo de germinación de distintos cereales, resultando la emergencia, en España, durante los meses de marzo y abril, cuando la temperatura del suelo alcanza la temperatura base (TB) de la rosquilla y la mantiene de forma constante. En ese momento, los ejemplares en hibernación se activan y comienzan la depredación sobre las plántulas y brotes, así como su ciclo reproductivo. A su vez, los huevos latentes comienzan a acumular GD y cuando alcanzan una temperatura acumulada de 90 GD eclosionan dando lugar a nuevos ejemplares.

 

Detección: el primer punto a tener en cuenta a la hora de valorar el riesgo de la presencia de gusanos grises es el historial de la parcela. Sabemos que los huevos y las larvas tienen periodo de hibernación, por lo que sobreviven al invierno y donde ha habido rosquilla, probablemente habrá rosquilla.

Para monitoreo de la plaga es importante instalar una serie de trampas de feromonas en las parcelas. Cuando tras dos noches capturamos entre 7 y 10 polillas adultas por campo, estamos ante un inminente riesgo de infestación.

Son importantes las prospecciones de suelo. Durante la fase de los primeros brotes de cosecha monitorearemos las plantas y donde veamos los indicadores de alarma (plántulas cortadas, marchitamientos, daños en el cuello del tallo, fallas en la nascencia) escarbaremos los primeros centímetros de suelo en busca de las larvas.

 

Prevención: Las medidas preventivas son la base del control integrado de plagas.

 

  • Laboreo del terreno durante el invierno, para exponer las larvas a depredadores, al frío y la desecación.

  • Control de malezas que sirven de alimento y refugio.

  • Siembras tempranas y vigorosas ya que las plantas desarrolladas son menos susceptibles a sufrir daños por parte de la plaga.

  • Rotación de cultivos. Dado que la rosquilla se alimenta de un amplio espectro de cultivos, debemos basar nuestra estrategia en la combinación de cultivos en rotación que conlleven el uso de cultivos de invierno, los cuales estarán plenamente desarrollados en el momento pico de la plaga, minimizando así la cantidad de alimento disponible para las larvas. Estos cultivos de rotación deben ser poco atractivos para la ovoposición. Las leguminosos de invierno son un buen ejemplo de ello.

  • Enterramiento de restos de cosecha. Esta práctica reduce los lugares de ovoposición y refugio de la plaga.

 

 

Control Biológico:

 

  • Hongos entomopatógenos: Especies como la Beauveria Bassiana y Metarhizium Anisopliae pueden infectar y matar a las larvas. Su aplicación es a suelo y su eficacia depende de la humedad y la temperatura.

  • Nemátodos entomopatógenos: tales como Steinernema y Heterorhabditis, de aplicación a suelo, parasitan a las larvas.

  • Bacilus thuringensis: se trata de una bacteria que produce toxinas específicas para las larvas de lepidópteros. Actúa atacando el sistema digestivo de las larvas a las pocas horas de la ingestión, matando los insectos a los pocos días. El tratamiento con BT (Bacillus thuringensis)en cereales para combatir la rosquilla, debe aplicarse durante la nascencia y repetirse a los pocos días de la misma para asegurar una protección durante la fase de vulnerabilidad del cultivo. Existen distintas cepas de BT por lo que debemos aprovechar esta variedad para intercalar distintos tipos de BT en cada aplicación.

  • Depredadores naturales: Distintos tipos de escarabajos carábidos, arañas y aves pueden depredad sobre las larvas si estas son expuestas mediante laboreo. Es importante realizar un laboreo superficial de la tierra antes de la siembra para exponer los ejemplares a la acción de estos depredadores.

 

Control Químico:

 

  • Tratamiento de semillas: las semillas pueden ser tratadas con insecticidas sistémicos como neonicotinoides o diamidas para proteger el cultivo en sus primeras fases, cuando es más vulnerable.

  • Aplicaciones post emergencia: tratamientos foliares y a suelo tras la emergencia de la plaga. Deben realizarse al atardecer o por la noche, cuando las larvas salen a la superficie para alimentarse, cuando se observan los primeros síntomas de ataque. Se pueden utilizar insecticidas piretroides como Lambda-cialotrina o deltametrina.

Para la aplicación de estos tratamientos es imprescindible seguir las pautas marcadas en la etiqueta y hoja de seguridad del producto.

 

Tabla resumen: Gusanos grises o rosquillas



Plaga

Gusanos grises o rosquillas (larvas de polillas nocturnas, Agrotis segetum, Agrotis ipsilon).

Daño

Cortan los tallos de las plantas jóvenes a nivel del suelo, causando marchitamiento y muerte.

Periodo crítico

Germinación y desarrollo de las plantas jóvenes (momento de la emergencia de la plaga).

Características

Orugas gruesas, de 3-5 cm, de color gris oscuro a marrón verdoso. Hábitos nocturnos, se esconden en el suelo durante el día.

Emergencia

Se activan en marzo-abril, cuando la temperatura del suelo alcanza los 7-10 °C. Los huevos eclosionan tras acumular 90 GD.

Detección

- Historial de la parcela: Revisar si hubo plaga en años anteriores.

- Monitoreo: Trampas de feromonas (riesgo si se capturan 7-10 polillas en dos noches).

- Prospección de suelo: Buscar larvas en los primeros centímetros del suelo donde se vean plantas dañadas.

Prevención

- Laboreo invernal: Para exponer las larvas.

- Control de malezas: Eliminar refugios y fuentes de alimento.

- Siembras tempranas y vigorosas: Las plantas desarrolladas son menos vulnerables.

- Rotación de cultivos: Combinar con cultivos de invierno que no sean atractivos para la puesta de huevos.

- Enterramiento de restos de cosecha: Reduce refugios.

Control biológico

- Hongos entomopatógenos: Beauveria bassiana, Metarhizium anisopliae.

- Nemátodos entomopatógenos: Steinernema, Heterorhabditis.

- Bacillus thuringiensis (BT): Bacteria que mata larvas tras la ingestión.

- Depredadores naturales: Escarabajos, arañas y aves (se activan con el laboreo).

Control químico

- Tratamiento de semillas: Con insecticidas sistémicos (neonicotinoides, diamidas).

- Aplicaciones post-emergencia: Piretroides como lambda-cialotrina o deltametrina, aplicados al atardecer/noche.